Esta cena de "Amarcord", de Federico Fellini, foi uma das que nunca mais esqueci: o pobre tolo a gritar "Voglio una donna!", em cima da árvore e sobre o descampado.
-(...) -A veces evitas ponerte a trabajar. Es una cosa extraña. -Por pereza? -Por miedo. No lo supe explicar, pero anoche , en la defensión extrema de la noche, en la claridad alucinada de la noche, mientras daba vueltas en la cama, comprendí exactamente lo que queria decir. Por miedo a todo lo que dejas sin escribir una vez que pasas a la acción. Por miedo a concretar la idea, a encarcelarla, a deteriorarla, a mutilarla. Mientras se mantienen en el rutilante limbo de lo imaginario, mientras son solo ideas e proyectos, tus libros son absolutamente maravillosos, los mejores libros que jamás nadia ha escrito. Y es luego, cuando vas clavándolos en la realidad palabra por palabra, como Nabokov clavaba a sus pobres mariposas sobre el corcho, cuando los conviertes en cosas inevitabemente muertas, en insectos crucificados, por más que los recubra un triste polvo de oro.Hay dias en los que esa derrota de la realidad te importa menos. De echo, hay dias en los que te sientes tan inspirada, tan repleta de palabras y de imágines, que escribes con una sensación total de ingravidez, escribes como quien sobrevuela el horizonte, sorprendiéndote a ti mesma con lo escrito: ¿Pero yo sabía esto? ¿Como he sido capaz de redactar este párrafo?A veces sucede que estás escribiendo muy por encima de tu capacidad, estás escribiendo mejor de lo que sabes escribir. Y no quieres moverte del asiento , no quieres respirar ni parpadear ni mucho menos pensar para que no se rompa ese milagro Escribir, en esos estraños raptos de ligereza, es como bailar con alguien un vals mui complicado y bailarlo perfecto. Giras y giras en brazos de tu pareja, trenzando intrincados y hermosíssimos pasos con los pies alados; y resuena la música de las palabras en tus oídos, y el mondo alrededor es un chisporroteo de arañas de cristal y candelabros de plata, de sedas relucientes y zapatos lustrosos, el mondo es una vorágine de brillos y tu baile esta rozando la más completa beleza, una vuelta y otra y continuas sin romper el compás, es prodigioso, con lo mucho que temes perder el ritmo, pisar tu pareja, ser una vez más torpe e humana; pero logras seguir un paso más, y otro y tal vez otro, volando entre os brazos de tu própria escritura.(...)
Um espectáculo!
ResponderEliminarE o que vou ouvir? Nino Rota, claro!
Um bom dia para si, APS, e HMJ.
ResponderEliminarObrigados, e igualmente para si, MR.
ResponderEliminarEsse é dos que gritam. E é doido.
ResponderEliminarE os que não gritam?
-(...)
ResponderEliminar-A veces evitas ponerte a trabajar. Es una cosa extraña.
-Por pereza?
-Por miedo.
No lo supe explicar, pero anoche , en la defensión extrema de la noche, en la claridad alucinada de la noche, mientras daba vueltas en la cama, comprendí exactamente lo que queria decir. Por miedo a todo lo que dejas sin escribir una vez que pasas a la acción. Por miedo a concretar la idea, a encarcelarla, a deteriorarla, a mutilarla. Mientras se mantienen en el rutilante limbo de lo imaginario, mientras son solo ideas e proyectos, tus libros son absolutamente maravillosos, los mejores libros que jamás nadia ha escrito. Y es luego, cuando vas clavándolos en la realidad palabra por palabra, como Nabokov clavaba a sus pobres mariposas sobre el corcho, cuando los conviertes en cosas inevitabemente muertas, en insectos crucificados, por más que los recubra un triste polvo de oro.Hay dias en los que esa derrota de la realidad te importa menos. De echo, hay dias en los que te sientes tan inspirada, tan repleta de palabras y de imágines, que escribes con una sensación total de ingravidez, escribes como quien sobrevuela el horizonte, sorprendiéndote a ti mesma con lo escrito: ¿Pero yo sabía esto? ¿Como he sido capaz de redactar este párrafo?A veces sucede que estás escribiendo muy por encima de tu capacidad, estás escribiendo mejor de lo que sabes escribir. Y no quieres moverte del asiento , no quieres respirar ni parpadear ni mucho menos pensar para que no se rompa ese milagro Escribir, en esos estraños raptos de ligereza, es como bailar con alguien un vals mui complicado y bailarlo perfecto. Giras y giras en brazos de tu pareja, trenzando intrincados y hermosíssimos pasos con los pies alados; y resuena la música de las palabras en tus oídos, y el mondo alrededor es un chisporroteo de arañas de cristal y candelabros de plata, de sedas relucientes y zapatos lustrosos, el mondo es una vorágine de brillos y tu baile esta rozando la más completa beleza, una vuelta y otra y continuas sin romper el compás, es prodigioso, con lo mucho que temes perder el ritmo, pisar tu pareja, ser una vez más torpe e humana; pero logras seguir un paso más, y otro y tal vez otro, volando entre os brazos de tu própria escritura.(...)
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